La afirmación la realizó Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica de Venezuela, quien aseguró que unos 22 mil médicos se fueron del país y la cifra va en aumento

Presidente de la Federación Médica de Venezuela conversó ofreció toda la información durante en el programa Dialogo Con. (Foto: Archivo)

Al menos entre ocho o 10 meses, “quizás más”, es el tiempo que debe esperar un paciente para ser intervenido en cualquiera de los 300 hospitales del país. Así lo afirmó Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica de Venezuela, quien afirmó que en toda Venezuela existen alrededor de unos 450 mil pacientes en cola para ser resuelto su caso.  

Colocó como ejemplo el caso del Hospital Padre Machado, en Caracas, donde tratan a pacientes oncológicos, quienes deben ser intervenidos quirúrgicamente de emergencia, pero los atienden tras cuatro o cinco meses.   

“Eso es inaudito lo que pasa en el Hospital Padre Machado, donde tenemos pacientes oncológicos que deben ser resueltos de hoy para hoy porque es cáncer (…) eso no pasa porque el médico quiera, sino sencillamente porque no hay el insumo o porque de seis u ocho pabellones no más que funciona uno y en oportunidades no tiene el anestésico, el gas o alguna cosa falta”, aseguró el galeno.

Natera señaló que la situación de la salud en el país es cada día peor, tanto en los hospitales como en las clínicas, porque los centros asistenciales están desabastecidos. A su juicio el Estado no llevan los recursos de manera suficientes a los hospitales, lo que incumple los artículos 83, 84 y 85 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

Lo cierto es que la gente se nos  muere de mengua. Apenas tenemos  dos, tres o quizás un cuatro por ciento de insumos, medicamentos y materiales médicos-quirúrgicos para que el médico y el equipo de salud trabajen por el bien de los pacientes”, destacó.

Recordó que todos los días ocurre mínimo una denuncia en por lo menos uno de los 300 hospitales o en los 12 mil ambulatorios que existen aproximadamente en la nación. Aseguró que en cada uno hay una protesta, observación o un reclamo diario, el cual no se oye.

“Desafortunadamente la gente, aquí en Venezuela, se acostumbró a quien protesta es el médico, el que exige por la salud del pueblo es médico y el equipo de salud. Él no es el afectado porque al final el que muere o sale amputado de un centro de salud, porque no hay insumos, es el paciente y el familiar no dice nada. Cuando sale es porque se ve el agua al cuello”, denunció el gremialista.


Retroceso

El profesional de la salud recordó que parte de la falta de insumo es por la gente poco preparada que el Gobierno colocó para manejar la tecnología de la salud que se compraron y eso trajo como consecuencia que se dañaran porque no los supieran operar.

“El difunto presidente Chávez, compró a través de Cuba, unos resonadores y equipos radiológicos que dieran la impresión de que colocaban una persona allí, quienes creían que era como una licuadora, que enchufaban el aparato y comenzaba a funcionar poniéndoles algo, pero resulta que se necesitan técnicos especialistas en esa materia y ya esos equipos están inservibles”, destacó Natera.

Aseguró que los hospitales de niños no tienen ni siquiera el suplemento alimentario para ayudar a la madre o al niñito cuando ella no puede darle la leche materna. Afirmó que en el Hospital Cardiológico Infantil, de la capital del país, hacen de dos a tres operaciones al mes en lugar de hacer, según su criterio, unas 100 al mes para resolver los problemas de los pequeños.

Indicó que la Organización Mundial de la Salud y la Organización Paramericana de la Salud declararon a Venezuela libre de ciertas enfermedades que reaparecieron. Un ejemplo de ello es la malaria, la cual el 80 por ciento de los casos se concentran el estado Bolívar.

“El Dengue llegó aquí y no hay manera de que se vaya, cuando nosotros hablamos de dengue en el 2001, el primero que salió a golpear a la federación médica fue el presidente fallecido. Ese año hubo 16 y muertos y más de 83 mil casos. Así sucesivamente todos los años con picos de más de 100 mil y una media de aproximadamente 40 mil casos al año”, contabilizó.

Señaló que ahora hay malaria, chikunguña, paludismo y difteria que reapareció en Guayana. “El paludismo que está que está en el arco minero, no es que venga de Brasil, sino que sencillamente está allí. Nueve de cada 10 personas, en esa zona de Tumeremo, municipio Sifontes, padeció o padece de la enfermedad”.

El presidente del gremio médico del país explicó, durante una entrevista en el canal Televen, que esto se debe la falta de políticas de prevención y de campañas de educación que se pudieron desplegar en las escuelas para convertir a los niños en agentes multiplicadores y difundir a través de los medios comunicación que posee el Gobierno.


Cada día más

En la actualidad un médico cobra un poco más del sueldo mínimo y con las guardias que son unas cuatro o seis al mes se redondea con 980 mil bolívares. A eso se suma la agresividad que viven los galenos en los centros de salud por parte de los directores y el personal que coloca el Gobierno en los pasillos son caldos de cultivo para que los médicos se marchen de la nación donde se formaron.

“No hay forma que podamos ejercer por esa agresividad, el salario miserable al que somos sometidos porque el Gobierno no se quiere sentar con la Federación Médica de Venezuela a firmar la contratación colectiva. Realmente son 22 mil médicos que los que se fueron al exterior, según un estudio hecho hasta hace dos meses y medio, tres meses. Y aun contamos la cantidad que se va por diferentes vías para el exterior”, aseguró el gremialista durante la entrevista.


http://www.laverdad.com/zulia/138473-venezuela-tiene-unos-450-mil-pacientes-en-espera-para-una-operacion.html